¿Porqué no podemos comunicarnos asertivamente en nuestra familia?
¿Qué es una comunicación asertiva?
La comunicación asertiva se define como aquella que nos permite expresarnos claramente, con respeto hacia nosotros mismos y los demás lo que nos lleva a defendernos sin ansiedad, ambas partes encuentran satisfacción en la conversación y así se llega a puntos concretos que permitirán una mejora en la relación.
¿Porqué no podemos comunicarnos asertivamente en nuestra familia?
Comúnmente en las relaciones familiares, sino se ha aprendido a comunicarse correctamente, priman más los sentimientos que la razón y los diálogos comienzan por expresar reproches, quejas, ofensas, etc; lo cual generará en la otra parte una defensa a estos ataques, por lo cual la conversación cambiará de rumbo y no será productiva.
¿Cuál es el momento más oportuno para comunicar algo importante?
No existe un tiempo ideal, pero si hay condiciones que facilitan la comunicación, entre ellas podemos mencionar algunas como por ejemplo:
- La persona debe estar tranquila, si estamos enojados o cansados mejor no hacerlo.
- Debemos tener tiempo, cuando estamos apurados no habrá una buena comunicación
- En particular debe ser en privado, no en público, los trapos sucios se limpian en casa.
- Es importante tener en claro lo que se va a decir, sin rodeos
- Expresarlo de manera tranquila y segura
- Es muy bueno, ponernos en el lugar del otro así lo entenderemos mejor y podemos llegar a mejores acuerdos.
- Analizar cada situación, ver los pro y o los contra, ¿qué mejorar, qué corregir, cómo hacerlo, que debo hacer para qué estas acciones tengan exito?
- Es importante pedir la luz del Espíritu Santo a fin de poder discernir con claridad, entender lo que nos dicen y llegar a conclusiones efectivas.
¿En una pareja, cuales son los puntos básicos a tocar en una buena comunicación?
En los matrimonios actualmente es común que las conversaciones se centren en hablar de cosas que no son fundamentales como por ejemplo; los pagos que debemos hacer, si los hijos hicieron las tareas o algún acontecimiento en particular, etc, no decimos que hablar de esto este mal, sino que si se habla de estos puntos hasta un punto que forman parte de una rutina dentro del diálogo, lo cual hace que se deje de lado puntos básicos e importantes como son: ¿Tú y yo como nos sentimos?, ¿nuestros hijos como están, el tiempo, el amor, la seguridad y el ejemplo que les damos son los adecuados, fuera de lo material que nos falta darles?, ¿cuáles son nuestros objetivos o que metas tenemos como esposos, como familia en este año?, ¿Estamos viviendo en una rutina que debemos hacer a fin de mejorar nuestra relación?, ¿Cuánto afecta el dinero a nuestra relación, qué medidas podemos tomar a fin de administrar mejor el dinero y que no afecte o dañe a nuestra relación?, ¿Dios es el centro de nuestra relación, porqué no oramos juntos, qué nos pide Dios en este momento?
Estas son preguntas casi nunca se hacen las parejas y son dejadas de lado y recién aparecen cuándo aparecen los problemas, la idea es que no se presenten cuando hay problemas, sino que nos sirvan como prevención y permitan dar soluciones oportunas a fin de evitar daños que van contra la pareja y los mismos hijos. Es necesario que la relación tenga bases sólidas cuando estas preguntas cuestionan a la pareja, se dan en un ambiente de calma y se buscan soluciones efectivas, entonces se está construyendo sobre bases solidas.
